La pandemia covid: Ivermectina, la vergüenza médica
Durante la llamada «pandemia de covid», que hoy parece haber sido una orquestación para servir a las ganancias y otras agendas, a los médicos se les prohibió recetar ivermectina, un medicamento aprobado para uso humano en 1966 por la FDA. Tony Fauci de los NIH, los CDC, la FDA y las prestituciones se pronunciaron en contra de la ivermectina. Los «funcionarios de salud» de las grandes farmacéuticas y los prostitutos ignorantes hicieron bromas sobre la ivermectina, que se ha utilizado de forma segura en todo el mundo durante más de medio siglo, calificándola de «medicina para caballos», insegura y potencialmente mortal para el consumo humano. Aquí hay un ejemplo de lo que dijo la FDA, propiedad de las grandes farmacéuticas: “No eres un caballo. No eres una vaca».
Los médicos que trabajaban en empresas que recetaban ivermectina fueron advertidos por sus empleadores, y si persistían en salvar a los pacientes en lugar de las ganancias de las grandes farmacéuticas, eran despedidos. Los médicos en la práctica privada fueron atacados por juntas médicas y sus licencias médicas fueron suspendidas o retiradas. Algunos de los médicos e investigadores más famosos y distinguidos del mundo fueron perseguidos y perdieron sus cargos. Las farmacias se negaron a respetar las recetas médicas de ivermectina. Se lanzó una fuerte campaña mediática contra todos los que recomendaban o recetaban Ivermectina.
Nunca hubo ninguna razón científica o médica para la campaña contra la Ivermectina. ¿Por qué la campaña en su contra?
La respuesta es que Big Pharma tenía una «vacuna» lista (lo que es más que evidente que la «pandemia» fue orquestada). Pero la “vacuna” no había sido probada ni aprobada. La “vacuna” solo podía usarse bajo una “autorización de uso de emergencia”, y solo podía otorgarse una autorización de uso de emergencia si no había curas. Por lo tanto, había que suprimir el hecho de que hubiese curas. Si se usara ivermectina y la gente se hubiera curado, las esperanzas de ganancias de las grandes farmacéuticas basadas en la “vacuna” de ARNm se hubieran desvanecido.
Big Pharma es la fuente de mucho dinero en el mundo médico: subvenciones de investigación para investigadores médicos, subvenciones para facultades de medicina, contribuciones de campaña para los miembros de los comités de salud de la Cámara y el Senado, publicidad colocada en los medios, intercambio de patentes con Fauci en los NIH y puerta giratoria, relaciones con agencias reguladoras como la FDA, y estos intereses hambrientos de dinero se alinean con el dinero de Big Pharma.
Se estructuraron incentivos financieros para que los hospitales clasificaran todas las muertes por todas las causas como «muertes por covid» para producir una tasa de mortalidad artificialmente alta que llevaría a las personas a exigir la «vacuna». La prueba PCR se utilizó para diagnosticar Covid porque tenía una tasa muy alta de falsos positivos. El uso de la prueba PCR inapropiada fue fundamental para la creación de la “pandemia”.
Todo estaba en su lugar para las ganancias masivas de la «vacunación» del mundo entero. Y aquí había una cura y un preventivo de bajo costo, que se interponían en el camino de ganancias masivas y una gran expansión del poder del gobierno sobre las personas que pisoteaban la libertad civil. Muchos creen que otras agendas, como la reducción de la población, están siendo atendidas por las muertes y la infertilidad causadas por las “vacunas” de ARNm.
La ivermectina tuvo que ser desacreditada y se usaron mentiras para desacreditar la cura.
Un gobierno corrupto de EE.UU. y Europa ,una gran industria farmacéutica, los medios de comunicación y el establecimiento médico corruptos hicieron todo lo posible para intimidar a los denunciantes y evitar que el público supiera que había una cura que hacía que el riesgo de una inyección no probada fuera ridículo.
Big Pharma y Tony Fauci (en España Salvador Illa, Fernando Simón y Pedro Sánchez, y Feijoo hubiera actuado igual, están todos comprados o son imbéciles, que es casi peor) podrían confiar en un gran número de profesores de facultades de medicina que viven de subvenciones de investigación de Big Pharma y NIH, en miembros de la Cámara y el Senado elegidos con contribuciones de campaña de Big Pharma, en medios respaldados por los ingresos publicitarios de Big Pharma, en funcionarios de la FDA en un puerta giratoria con Big Pharma para establecer y controlar la narrativa oficial de Covid. Se persiguió a los peritos honestos incorruptibles y a los medios alternativos que informaban con veracidad.
Piense en lo que significa vivir en un país donde el dinero triunfa sobre la integridad. Sin integridad no puede haber confianza. ¿Las personas cuya salud o la de familiares y amigos resultaron dañadas por la vacuna Covid o los cierres y aquellos cuyos familiares murieron como resultado de la vacuna no probada volverán a confiar en un médico, un hospital, los medios de comunicación, los políticos? ¿Quién volverá a confiar en un farmacéutico que rechazó la receta que hubiera salvado la vida de un cónyuge o de un hijo? ¿Quién volverá a respetar a una junta médica que robó la licencia de un médico que salvó la vida de los pacientes con ivermectina?
¿Por qué se orquestó la pandemia de Covid? ¿Fue sólo por dinero? ¿Fue para probar el compromiso del público con la libertad civil? ¿Fue una prueba de una pandemia real y mortal para reducir la población? ¿Por qué si no gente como Bill Gates y Klaus Schwab hablan tanto de reducir la población a menos que tengan la intención de hacerlo?
El mal siempre ha sido el mayor enemigo de la humanidad. Pero los liberales occidentales han pasado un siglo menospreciando el mal como una superstición, algo que se puede corregir con educación y modificación del comportamiento. En consecuencia, los liberales occidentales desataron el Mal. La religión ya no se trata de salvar tu alma. Se trata de reformar la sociedad. ¿Es posible que el público comprenda el mal en el que vivimos?
Posiblemente, la verdad alguna vez sale a la luz. Enfrentada a una demanda judicial de tres médicos perseguidos que salvaron vidas con ivermectina, la corrupta FDA, una agencia “reguladora” que sale del bolsillo de las grandes farmacéuticas, ha cambiado por completo su tono.
Por supuesto, dicen los abogados de la FDA, los médicos tienen derecho a recetar todos y cada uno de los medicamentos aprobados por la FDA, incluida la ivermectina. La FDA nunca impidió que los médicos hicieran recetas. Era legal que lo hicieran.
Entonces, ¿por qué los médicos perdieron sus licencias? ¿Por qué los farmacéuticos se negaron a surtir las recetas? La FDA miente que solo hizo una recomendación de no usar Ivermectina. ¿Sobre qué base se hizo la recomendación de la FDA? Claramente no se basó en el conocimiento médico.
El intento de desacreditar a la ivermectina y a los médicos que la recetaron se hizo para ocultar el hecho de que había una cura que bloquearía la «autorización de uso de emergencia» de la «vacuna» mortal no probada. Todo el establecimiento médico cooperó en lesiones y asesinatos masivos por el bien de las ganancias de Big Pharma y cualquier otra agenda que estuviera operando.
En un reportaje de 10 minutos en Epoch TV, Roman Balmakov informa sobre el caso presentado por tres médicos perseguidos contra la FDA corrupta. Son 10 minutos bien aprovechados: https://www.theepochtimes.com
¿Cómo podemos confiar en un establecimiento médico que nos dice que las muertes súbitas sin precedentes entre los jóvenes son una «coincidencia»?
El establecimiento médico corrupto continúa ocultando el hecho de que la vacuna Covid es MORTAL.
https://www.globalresearch.ca/teenagers-dying-suddenly-australia-uk-ireland/5828985
***
Fuente: https://www.unz.com/proberts/the-covid-pandemic-a-case-study-of-money-trumping-integrity/
Lea también: La imperdonable estafa de la ivermectina
Las termitas del cielo 